Normalmente cuando estoy en Alsacia, hago muchas salidas por la zona, una de ellas fue para hacer una cata de vinos y aunque el tiempo estaba algo inseguro (como es bastante normal en estos lares), pude hacer unas instantáneas del pueblo con su iglesia del siglo XII, sus flores, viñedos y tambien arriba en la montaña una necrópolis. Siempre me impresiona ver estos monumentos y no dejo de lamentar la cantidad de vidas que se pierden en las guerras.
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